Los ayuntamientos acostumbran a poner en marcha la mayor cantidad de obras posible en los meses previos a las elecciones, puesto que lo más reciente es con lo que se queda el votante. Y el Ayuntamiento de Torrelavega no es una excepción.

En los últimos meses se han adecuado diferentes viales y una de las calles más transitadas de la Capital del Besaya, Julián Ceballos, ha comenzado su remodelación y permanece cerrada al tráfico, alterando por completo la vida de los vecinos del 39300.

A quienes también han afectado es a los pequeños comercios que se encuentran ubicados en la citada calle. El ejemplo perfecto de esta situación lo refleja a través de sus redes sociales Luarte Tattoo, un estudio de piercing y tatuajes muy conocido en Torrelavega.

Beatriz, propietaria del negocio, ha compartido un vídeo en su Instagram en el que muestra lo difícil que es para sus clientes poder acceder al establecimiento a causa de las obras de la calle, que prácticamente afectan hasta la puerta de su estudio. Un ejemplo de que al Ayuntamiento de Torrelavega le preocupa poder finalizar las obras, pero no tanto la situación del pequeño comerciante de la localidad.