El 34% de los coches, unos 107.000, se verían afectados en Cantabria por las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) si se implantaran restricciones de circulación a los vehículos con etiqueta medioambiental B, según un estudio de AutoScout24 -perteneciente al el especialista en portales verticales de motor Sumauto- elaborado a partir de datos de la Dirección General de Tráfico.

Además, si se sumaran las restricciones a los coches con etiqueta B y las limitaciones de las ZBE a los que no tienen distintivo medioambiental, el 63% de los coches en este territorio no podrían circular por estas zonas, sobre un total de parque de algo más de 319.000 turismos.

Esto ocurriría si Cantabria siguiera los pasos por ejemplo de Cataluña, donde está previsto implantar para 2028 restricciones de circulación a los coches con etiqueta B.

Con el objetivo de cumplir la Ley de Cambio Climático, las Zonas de Bajas Emisiones deben ponerse en marcha en dos ciudades cántabras, Santander y Torrelavega, afectando a más de 200.000 personas, lo que supone el 34% de la población.

A NIVEL NACIONAL 

A nivel nacional, las ZBE afectarán a 149 municipios españoles en los que residen más de 25 millones de personas, es decir, el 53% de los habitantes del país.

De acuerdo a las restricciones ya conocidas para los coches sin distintivo y a las próximas limitaciones para los que tienen etiqueta B, a medio plazo el 59% del total de turismos que hay en España tendrían acotada la circulación por las áreas de bajas emisiones.

Según el portavoz de AutoScout24, Ignacio Gª Rojí, con las nuevas restricciones anunciadas, "seis de cada diez coches en nuestro país tendrán limitaciones de circulación en las grandes ciudades, lo que plantea una España a dos emisiones": "por un lado, urbes masificadas con vehículos electrificados que podrán circular libremente; y, por otro, ciudades menos pobladas y zonas rurales donde podrán circular sin ningún veto los vehículos más contaminantes".