EDUCACIÓN
Piden la retirada del programa de Historia de España de la PAU por "tendencioso y negacionista"
Podemos Cantabria ha calificado de “deplorable” el programa de Historia de España para la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU), ya que “es tendencioso y negacionista, además de tergiversar varios episodios de la Historia de España, sobre todo aquellos referidos al golpe de Estado de 1936”, por lo que exigen a la Consejería de Educación y la Universidad de Cantabria (UC) su retirada “de manera urgente”.
En palabras del secretario de Educación de Podemos Cantabria, Pablo González, “es una vergüenza y una vuelta de tuerca a la reciente derogación de la Ley de Memoria Democrática de Cantabria, ahora pretendiendo cambiar la historia de nuestro país, equiparando a los represores con las víctimas”.
Asimismo, González considera que frases como “la discordia política en España como origen de la guerra civil”, “la evolución de la política, la economía y la represión en ambas zonas”, o “reconoce las transformaciones económicas y sociales durante la dictadura de Franco”, recogidas en este programa, “ejemplifican la intención de justificar a un dictador sanguinario y a un golpe de Estado contra una República legítima y democrática”.
En este sentido, desde Podemos subrayan que, “no contentos con incorporar estas barbaridades al programa, sus responsables se han atrevido a englobar el machismo y la violencia contra las mujeres en el epígrafe ‘modos de convivencia entre hombres y mujeres’. Es un despropósito mayúsculo”, remachan. “Para rematar esta infamia”, destaca González, “se presenta al monarca Juan Carlos I, junto a otros franquistas ilustres, como el artífice de la Transición y de la llegada de la democracia. Y esto”, recuerda el responsable morado, “se hace obviando conscientemente las revelaciones que, desde hace años, todo el mundo va conociendo acerca de la vileza de este personaje”.
Por todo esto, desde Podemos exigen, tanto a la Consejería de Educación como a la UC, “la inmediata retirada de este programa y una nueva redacción del mismo que se sitúe a la altura de la realidad histórica, y no a la de una interpretación retorcida que parece querer reescribir lo que, de hecho, significó el fascismo en nuestro país”.