SUCESOS
El juez rechaza los recursos de los jóvenes en prisión por la mortal agresión en Boo
El juez que instruye las diligencias por la mortal agresión en el apeadero de Boo de Piélagos, en la que falleció un joven de 21 años y otros dos de 19 y 20 están siendo investigados, ha rechazado los recursos interpuestos por los abogados defensores contra el auto de prisión provisional comunicada y sin fianza que decretó el magistrado después de tomarles declaración.
Así lo establece el instructor en sendos autos, consultados porEuropa Press, a raíz de la petición de libertad de ambos letrados, a la que se opuso la Fiscalía de Cantabria dada la "extrema gravedad" de los hechos que se imputan inicialmente (homicidio y omisión del deber de socorro también), han indicado fuentes del ministerio público a esta agencia.
El titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Santander acordó la medida tras lo acontecido sobre las siete de la mañana del sábado 3 de febrero en la estación de tren de Boo: una "brutal agresión" por la que fueron detenidos dos chicos del municipio, por causar presuntamente la muerte a otro, vecino de Polanco, que cayó a las vías del tren con motivo de la pelea.
El juez se ha opuesto a que los dos investigados salgan de El Dueso teniendo en cuenta que "el resultado de la agresión, pelea o como quiera llamarse, es el que es: una persona muerta por otras dos que no sufren un solo rasguño".
Añade a este razonamiento la versión de uno de los tres testigos esenciales -un joven que viajaba en el tren y dos chicas que se apearon en Boo-- según la cual el que falleció fue "golpeado por ambos investigados y zarandeado como un si fuera un muñeco".
"El comportamiento posterior, de desprecio absoluto por la vida del fallecido, dejándole a su suerte en una vía de tren con el riesgo de que el vehículo le pueda pasar por encima, ha sido reconocido directamente por ambos investigados, que no movieron un músculo tras la atroz acción para auxiliar a la víctima", abunda el magistrado.
A este respecto, y a propósito de lo alegado en un dictamen pericial que acompaña el recurso de uno de los detenidos, según el cual reaccionó así y se fue "corriendo" a casa porque la situación "le superó por shock, miedo y/o paralización", el juez se pregunta "¿a qué tenía miedo? El fallecido ya nada podía hacerle", responde.
Al hilo, apunta que en caso de quedarse en el lugar para auxiliar a la víctima, podría haber sido identificado por la Policía, pero habría evidenciado "un intento de limitar las consecuencias dañinas de su proceder, que sería valorable ahora".
Sobre la causa de la muerte, "violenta en estudio", según el primer informe forense -pendiente de los resultados definitivos de la autopsia-, el magistrado subraya que lo sucedido "está causado por algo externo".
Y razona al respecto que a él "no se le ocurre qué otra cosa puede ser que una agresión conjunta como la que se investiga, máxime valorando el comportamiento posterior a la agresión", de "total desprecio por la vida humana", recalca.
TESTIGOS
En cuanto a los testigos que vieron lo que pasó, apunta el magistrado que "en absoluto ha quedado justificada" la supuesta enemistad de una chica con uno de los investigados, y de sus familias, a raíz de "alusiones jocosas hace cinco años".
Pero, de haberse producido las mismas, "pretender que configuren una situación de enemistad manifiesta" que lleve a la joven a "fabular un hecho tan grave es contrario a la más elemental de las lógicas".
Y sobre si la víctima bajó "voluntariamente" del tren, como dijo el testigo que viajaba dentro -amigo de uno de los investigados y que es "miope y daltónico"- o "agarrado por los brazos", como señala una de las jovenes que se apeó en esa estación, para el magistrado "tiene poca relevancia" pues el resultado de la pelea o agresión es el ya citado: una persona muerta por otras dos que no sufren ni un rasguño.
En cualquier caso, señala que los tres testigos directos narran una acción "conjunta" de los investigados en la que "ambos propinan golpes" al otro chico e "intervienen" en el hecho de que caiga a la vía, sin ser "especialmente relevante" que "se le empuje o que caiga por causa de las patadas y puñetazos que le pegaban".
Además, insiste el juez: "ninguno de ellos, una vez sucedido esto, le presta el más mínimo socorro, abandonando el lugar con desprecio manifiesto por su vida".
La Fiscalía se opuso a ambos recursos al no haber variado las circunstancias que determinaron la adopción de la medida cautelar de prisión. "Presuntamente, los investigados golpearon al fallecido con puñetazos y patadas, lanzándolo finalmente a las vías del tren, marchándose seguidamente ambos acusados sin asegurarse ninguno de ellos si podía ser auxiliado, dejándolo caído y prácticamente muerto en el andén pues falleció instantes después, todo ello sin perjuicio del informe de la autopsia definitivo", dice el ministerio público.
Ambos recursos eran de reforma y subsidiarios de apelación, por lo que una vez rechazados por el juez instructor se tramitarán los siguientes, ante la Audiencia de Cantabria, una vez presenten los nuevos argumentos para recurrir.