El Consejo de Gobierno de Cantabria ha aprobado en su reunión de esta semana la modificación del decreto de la Consejería de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente por el que regulan las ayudas del pago del alquiler de viviendas en Cantabria con el fin de sustituir el actual pago con tres meses de carencia por el pago a mes vencido, así como ampliar el tipo de beneficiarios para que todo tipo de ciudadano con necesidades y que cumpla con los oportunos requisitos regulados por la normativa actual pueda acceder a este tipo de ayudas.

La nueva medida pretende, tal y como ha explicado el consejero del ramo, Roberto Media, dar respuesta a la necesidad de los ciudadanos de Cantabria de percibir con más premura y agilidad este tipo de ayudas “tan demandadas en Cantabria” a la hora de hacer frente a los pagos de un tipo de vivienda, el alquiler, cuyos precios de mercado “son muy elevados en la actual coyuntura económica mundial”.

Medida ha recordado que este cambio normativo supone volver al sistema que funcionaba antes de la pandemia y que consistía en que cada beneficiario tenía que entregar, ya sea de manera presencial o de manera telemática, el justificante de su contrato de alquiler para poder cobrarle a mes vencido, pero que, por motivos socio sanitarios vinculados a la COVID-19, se tuvo que cambiar de manera temporal a un sistema de pago con tres meses de carencia, “con lo que eso conlleva de retrasos en los pagos para miles de cántabros, y que ahora podrán verse beneficiados con este acortamiento de plazos en el cobro”. 

Además, la Consejería ha querido modificar el decreto para que dotar a los beneficiarios de estas ayudas de un carácter “más universal y de mayor accesibilidad a todo tipo personas”, ya que, tal y como ha recordado, “hasta el momento sólo pueden percibir el pago personas que pertenezcan a uno de los 17 grupos de colectivos que la normativa considera que tiene mayores dificultades para acceder al pago de un alquiler de vivienda”. 

Con este cambio, ha continuado Media, “lo que hacemos es abrir estas ayudas a todo tipo de personas, siempre y cuando cumplan con los requisitos que siempre se han exigido para acceder a este tipo de ayudas y que están relacionadas con los límites de las rentas o los contratos de alquiler”.

Otro de los motivos que ha llevado al Gobierno de Cantabria a modificar la regulación de estas ayudas es mejorar los procedimientos internos de gestión de la Consejería con el fin de facilitar el pago a los ciudadanos con unos sistemas de tramitación burocrática que, ha asegurado, “serán más óptimos y ágiles para los ciudadanos”.

El titular de Vivienda del Gobierno de Cantabria ha destacado la importancia de una medida que beneficia a unos 1.200 ciudadanos al mes con unas ayudas a las que la Consejería destina este año una partida presupuestaria de casi 7 millones de euros.