Especialistas del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM) de la Guardia Civil de Potes han rescatado en la noche del viernes al sábado a dos escaladores en los Picos de Europa tras más de 13 horas de "complicada" intervención.

La Guardia Civil de Cantabria ha informado que el pasado viernes sobre las 22.30 horas recibió el aviso de dos escaladores que se habían perdido en la zona de los Picos de Europa conocida como 'Agujas de Tajahierro'.

Los dos escaladores, dos hombres naturales de Vigo de 52 y 53 años, solicitaban que se les sacase del lugar al no encontrar la vía de bajada.

Se activó al GREIM de Potes, estableciéndose contacto telefónico con las personas extraviadas para poder precisar todas las circunstancias de ubicación, así como su estado de salud.

De inmediato, se inició el operativo de búsqueda y a la vista de la previsión meteorológica de la zona para las siguientes horas, los especialistas reforzaron su equipo habitual con material necesario para progresión nocturna por pared, escalada y ropa de abrigo para los accidentados, así como diverso material para pasar la noche.

Al amanecer se reinició el rescate, constatando que el tiempo había empeorado y que el fuerte viento haría imposible un rescate por vía aérea

Ya en la zona de Tajahierro, tras más de 120 metros escalados por las distintas agujas de esta montaña, la abundante lluvia y la espesa niebla, junto con lo deteriorado del terreno, obligó a los especialistas a extremar las precauciones en la progresión, siendo esta muy lenta, alcanzando sobre las 4.00 horas la cima conocida como 'Aguja Ostaicoechea', comprobándose que en ese lugar no se encontraban los montañeros afectados, al igual que en la 'Torre del Cuarte', donde llegaron una hora más tarde.

A las inclemencias meteorológicas se sumó un fuerte viento que impedía continuar con la progresión de manera segura, por lo que los especialistas decidieron detener la búsqueda, haciendo un vivac para pasar la noche, estando éstos en continuo contacto telefónico con los afectados para conocer su estado de salud e informarles de las incidencias.

Al amanecer se reinició el rescate, constatando que el tiempo había empeorado y que el fuerte viento haría imposible un rescate por vía aérea, por lo que los guardias civiles continuaron con su ascenso, pudiendo contactar visualmente con los afectados a las 8.00 horas del sábado aproximadamente.

Una vez atendidos los montañeros de unos cortes en sus manos y piernas y, ante su buen estado anímico, se inició un complicado descenso de cerca de cuatro horas.