TURISMO
Cinco de las playas menos conocidas de Cantabria a las que querrás ir a partir de ahora
Cantabria cuenta con más de 200 kilómetros de costa en los que se encuentran más de 90 playas, todas ellas muy diferentes entre sí. Desde playas urbanas que cuentan con todo tipo de servicios y comodidades para los visitantes que quieran disfrutar de las aguas del Mar Cantábrico, hasta arenales más pequeños e íntimos en los que la naturaleza continúa siendo la gran protagonista.
Precisamente estos últimos son los protagonistas de esta lista, que reúne algunas -existen muchas más- de las playas más desconocidas y sorprendentes de nuestra región:
Playa de San Julián, Liendo
Situada en la costa oriental de Cantabria, en una pequeña y escondida cala rodeada por agrestes peñas. Su acceso se realiza desde la localidad de Villanueva, en el valle de Liendo. El descenso a la arena ha de realizarse a pie en su último tramo.
Playa de Santa Justa, Ubiarco
Situada en la costa de Santillana del Mar, junto al pueblo de Ubiarco, por lo que también se la conoce como Playa de Ubiarco. En sus inmediaciones existe una antigua ermita ubicada en una cavidad formada en el núcleo de un espectacular pliegue anticlinal.
Playa de Aramal, Pechón
Ubicada en la costa occidental de Cantabria, en Pechón, junto a la Playa de Amió, con la que se une en la bajamar. Este último arenal es el más frecuentado de las cercanas a Pechón. En realidad es un tómbolo o lengua de arena que se une con un pequeño islote durante la bajamar.
Playa de Berellín, Prellezo
De gran belleza natural por sus llamativas formaciones kársticas. También es conocida como Playa de Barnejo o playa de Prellezo, localidad de la que dista un kilómetro por un acceso más indicado para peatones.
Playa de Antuerta, Ajo
Arenal encerrado entre acantilados, cuyo acceso ha de realizarse recorriendo unos 300 metros a pie desde la playa de Cuberris.