La Guardia Civil de Cantabria, en una operación contra el robo en viviendas, detuvo el 22 de diciembre a un vecino de Barreda de 19 años tras haber protagonizado una peligrosa huida y permanecer atrincherado durante más de dos horas en una vivienda. Finalmente se entregó poco antes de que los agentes fueran a entrar por la fuerza en la casa.

Previamente, había huido de la Guardia Civil en un vehículo a gran velocidad por Barreda, sin tener permiso de conducir y cerca de un colegio. Embistió a varios vehículos, uno de ellos de la Guardia Civil, para evitar ser detenido. Debido a esas colisiones tuvo que abandonar el turismo y comenzó una persecución a pie hasta la casa de un familiar donde se ocultó.

La operación comenzó tras el robo de una vivienda en Cerrazo el pasado mes de octubre donde, tras forzar una ventana, sustrajeron una importante cantidad de instrumentos musicales valorados en unos 15.000 euros. La investigación permitió averiguar que uno de los instrumentos se había puesto a la venta lo que permitió conocer la identidad del vendedor, que presuntamente estaba utilizando la identidad de otra persona.

El hombre que intentaba vender el instrumento, un vecino de Torrelavega de 43 años, tenía relación con el joven de 19 años residente en Barreda, este último conocido de los agentes por su presunta implicación en otros delitos.

Se descubrió que el robo había sido perpetrado por tres hombres. El 21 de diciembre se detuvo al residente en Torrelavega; al día siguiente, tras atrincherarse en una vivienda, al vecino de Barreda; y el 24 de diciembre se detuvo al tercero, de 23 años y residente en Reocín.

Durante la operación se registró el domicilio de Barreda donde residía el segundo detenido. Allí los agentes encontraron y recuperaron todos los instrumentos sustraídos, entre ellos siete guitarras, un piano, altavoces, etcétera. Tras el registro se detuvo también a una mujer de 22 años, que residía en la vivienda, por su presunta relación con el robo.

MALTRATO ANIMAL

Durante el registro en la vivienda, los guardias encontraron en el jardín evidencias de que se habían realizado peleas de gallos, entre ellas un gallo muerto. Por este motivo se imputó a los residentes de la casa como presuntos autores de un delito de maltrato animal.

Al joven de 19 años, además, se le instruyen diligencias como presunto autor de los delitos contra la seguridad vial, por conducción sin permiso y de forma temeraria, atentado contra los agentes de la autoridad, y por tener en vigor una requisitoria judicial. Los detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de guardia de Torrelavega, que decretó el ingreso en prisión para el joven de 19 años.

Esta operación ha sido realizada por efectivos de Seguridad Ciudadana y Policía Judicial de la Guardia Civil de Torrelavega, con el apoyo de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC) de este Cuerpo.