EDUCACIÓN

Denuncian que el IES Augusto González Linares no reúne las condiciones mínimas de seguridad

Inundaciones en el IES Augusto González Linares de Santander
Inundaciones en el IES Augusto González Linares de Santander

La Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras en Cantabria (CCOO) ha lamentado este lunes que la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria ha hecho "caso omiso" al requerimiento de la Inspección de Trabajo tras la denuncia del sindicato, en el que instaba a la Administración a subsanar las "deficiencias" existentes en el IES Augusto González Linares de Santander.

Así, tras "dar margen" a la Consejería para cumplir con el requerimiento y comprobar que "poco se ha hecho", la Federación de Enseñanza ha vuelto a poner en conocimiento de la Inspección de Trabajo la situación, que "una vez más le ha vuelto a dar la razón, señalando que está casi todo pendiente" y, por tanto, el requerimiento se ha elevado a la Delegación del Gobierno, ha indicado CCOO en nota de prensa.

CONDICIONES PRECARIAS

Para el sindicato, "es inaudito que se siga condenando al personal y al alumnado de este centro a dar y recibir las clases en condiciones precarias y en un estado de riesgo constante y que no hayan servido de nada las movilizaciones que unieron a profesorado y alumnado bajo una misma causa y que, además, fueron el germen de este conflicto".

Por esta razón, desde la Federación de Enseñanza de CCOO en Cantabria no descartan iniciar nuevas concentraciones o acciones reivindicativas "si la Administración sigue mirando hacia otro lado". "Es una vergüenza que todo siga igual, que no se haya hecho casi nada por resolver los problemas estructurales que hay en este centro y que se están volviendo crónicos", ha valorado la secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO en Cantabria, Conchi Sánchez.

Es una vergüenza que todo siga igual, que no se haya hecho casi nada por resolver los problemas estructurales que hay en este centro

Según ha explicado, "fue hace más de diez meses cuando Inspección de Trabajo dio la razón a la Federación de Enseñanza, que denunció que el centro no reunía las condiciones mínimas de seguridad y que, además, se obligaba al personal a trabajar en condiciones precarias". Concretamente, advertían de que "tanto el edificio como el entorno exterior sufren un deterioro estructural que provoca repetidas inundaciones y que en las aulas hay grietas por las que se filtra el agua y que producen goteras".

Inspección de Trabajo ha apuntado ahora que "no se ha cumplido la propuesta de requerimiento formulada por la Inspección en lo que se refiere a los deshumificadores, que no se ha cambiado la carpintería exterior ni las ventanas y que no hay información sobre la reunión de revisión de la evaluación de riesgos del mes de abril de 2024".