Vecinos de Barreda ya pueden circular por la nueva acera de la margen derecha de la Avenida de Solvay
Los vecinos están agradecidos por haber solventado una "situación de inseguridad" que la gente de la zona venía sufriendo durante tantos años, especialmente con el paso habitual de niños que se dirigen hacia los dos colegios que se ubican en este barrio.
Los vecinos de Barreda ya pueden circular por la nueva acera de la margen derecha de la avenida de Solvay, cuyas obras han concluido este miércoles y suponen resolver una "demanda histórica".
El alcalde de Torrelavega, José Manuel Cruz Viadero, y el concejal de Obras y Barrios, Javier López Estrada, acompañados de miembros de la asociación de vecinos, han asistido a la finalización de los trabajos.
Éstos se han llevado a cabo en un tramo de 20 metros, que cuentan desde hoy con unas aceras de aproximadamente 1,5 metros de anchura, y que suponen la tercera fase de unas obras que ha contado con un presupuesto que ronda los 9.000 euros. Para su ejecución, el Ayuntamiento llegó previamente a un acuerdo "amistoso" con los propietarios de la finca afectada.
Tanto el alcalde como el primer teniente de alcalde han mostrado su "satisfacción" por la realización de esta "obra de microcirugía" urbana, "demandada históricamente por los vecinos de Barreda" durante varias décadas.
De esta manera, se mejora la seguridad del tránsito de vehículos y la seguridad de los peatones, que antiguamente debían bajar a la calzada para atravesar el tramo de una Avenida de Solvay que, cabe recordar, es uno de los viales con más tráfico del municipio.
Como ha recalcado López Estrada, la mejora de esta avenida se trataba de una de las prioridades del equipo de gobierno, por lo que comparte con el alcalde la satisfacción de haber conseguido dar respuesta a este "compromiso" en apenas un año de legislatura.
Durante la visita, como ha subrayado Cruz Viadero, varios vecinos han aprovechado para trasladarles su agradecimiento por solventar una "situación de inseguridad" que la gente de la zona venía sufriendo durante tantos años, especialmente con el paso habitual de niños que se dirigen hacia los dos colegios que se ubican en este barrio.