USO urge a Solvay a invertir 100 millones en Barreda para sustituir el carbón por otras energías
USO ha planteado una alternativa para la fábrica de Barreda, para que no haya "tensiones" o "sobresaltos" de producción o empleo.
La sección de USO en Solvay ha instado a la dirección a abandonar "con urgencia" la quema de carbón para la generación de energía (vapor y electricidad) en la fábrica de Barreda (Torrelavega), para la que el sindicato ha propuesto una inversión cercana a los 100 millones de euros para un 'mix energético', con una nueva central de ciclo combinado, de cogeneración de gas y la implantación progresiva de renovables térmicas como la biomasa o la solar.
Y es que según ha alertado la formación sindical, "o se toman medidas a tiempo" o habrá "graves" consecuencias para el empleo de la factoría del Besaya, que cuenta con una plantilla "menguante permanentemente" y que tras los últimos despidos acordados y el cierre de la planta de cloro se quedará, a finales de 2019, con 335 empleos directos, muy por debajo de los más de 2.000 puestos que había hace cuatro décadas.
Así lo ha señalado este miércoles José Vía Iglesias, delegado de USO en Solvay, en una rueda de prensa en la que ha instado a la dirección a acometer la transición energética, "trascendental" para el futuro de la empresa y de la plantilla durante los próximos 25-30 años.
De este modo, ha invitado a abandonar "cuanto antes" la quema de carbón (con la que se genera un millón de toneladas anuales de carbonato en Torrelavega para cubrir las necesidades de vapor y electricidad, y que supone la misma emisión de CO2 a la atmósfera), para cumplir así con la normativa europea -que plantea procesos productivos basados en 'cero carbón' en los próximos años- y evitar también lo sucedido con la producción de cloro con mercurio.
El Gobierno de Cantabria denegó el pasado mes de septiembre la moratoria solicitada por Solvay para adecuar sus procesos productivos de cloro en Barreda a la normativa de Bruselas que prohíbe, desde diciembre de 2017, el uso de la técnica de mercurio.
Ante esto, el sindicalista ha rechazado "parches" y ha alertado de las consecuencias de posibles "chapuzas" como "prórrogas imposibles", en alusión a lo sucedido en la planta de cloro y que se podrían repetir si no se actúa "a tiempo".
"Retrasar la transición energética es ir contracorriente", ha advertido Vía, que ha recordado que tanto los expertos como la Comisión Europea apuntan a un 'mix energético' sin carbón para los procesos productivos en España.
ALTERNATIVA DE USO
Por ello, USO ha planteado una alternativa para la fábrica de Barreda, para que no haya "tensiones" o "sobresaltos" de producción o empleo en las próximas dos o tres décadas, sino un "futuro despejado". Dicha propuesta, para la que se requiere una inversión de 100 millones de euros por parte de Solvay, se basaría en una nueva central de ciclo combinado de 150-180 megawatios y 350-400 toneladas por hora de vapor, solución contemplada en la Autorización Ambiental Integrada (AAI) concedida por el Ejecutivo regional a la planta.
Esa central, hecha y operada por Solvay, sería la "columna vertebral" para el futuro del complejo fabril, que también precisaría de una nueva cogeneración de gas de 50-70 megawatios que sustituya a la actual, que está ya a punto de concluir su vida útil. Concretamente, como ha recordado el portavoz del sindicato, le quedan dos años.
Paralelamente, habría que proceder a la implantación progresiva de energías renovables térmicas, como la biomasa o la solar, para la generación de vapor que "es lo que más necesita Solvay" para su proceso productivo en Barreda.
"NO ESTAMOS PARA PARCHES"
En su comparecencia ante los medios, y a preguntas también de los periodistas, José Vía se ha referido al reciente anuncio del consejero de Industria, Francisco Martín, en el Pleno del Parlamento, donde avanzó que la dirección del grupo -con plantas en España y otros países- presentará, según dijo, "en pocos meses una propuesta de cambio de paradigma energético absoluto, con inversiones millonarias, también en Barreda".
El representante de USO espera que esto "no sea un parche". "No estamos para poner parches al proceso productivo de Solvay, sino para garantizar su futuro a 25-30 años", ha insistido Vía, para reiterar la apuesta del sindicato por sustituir la tecnología "obsoleta y contaminante" en vez de realizar prórrogas.
De ahí la petición a Solvay de una inversión de 100 millones de euros, que sería "la más importante" de la última década y que marcaría el futuro del complejo fabril de Torrelavega, además de la repercusión que dicha inyección tendría sobre la economía de la comarca del Besaya en particular y de Cantabria en general. Porque, además de mejorar la calidad del aire, el 'mix energético' ayudaría a mantener el empleo "de calidad y bien retribuido" que hay en la actualidad en la planta.
GOBIERNO Y PARLAMENTO
Por todo lo anterior, desde el sindicato emplazan al Gobierno de Cantabria (PRC-PSOE) a que asuma su responsabilidad política e impulse y coordine las acciones necesarias para que la transición energética en esta fábrica sea "un hecho", en vez -ha dicho Vía- de seguir "en el tendido" para mirar "los toros desde la barrera".
Y, en caso contrario, pedirán a los partidos políticos con representación en el Parlamento (PP, Podemos, Cs y el diputado del grupo mixto Juan Ramón Carrancio) que "activen" al Ejecutivo si éste "no actúa", para que asuma este asunto y que las distintas formaciones que no se muevan únicamente por la "primavera electoral" de 2019, es decir, por los comicios autonómicos y municipales del próximo año.