INDUSTRIA

USO denuncia la “política de recortes” de Solvay en prevención y atención médica

Fábrica de Solvay en Torrelavega

El sindicato considera “inaceptable” que la empresa elimine en Torrelavega el vehículo de ambulancia propio y externalice el servicio médico de la empresa.

USO ha denunciado este miércoles en rueda de prensa que la "política de recortes" que viene aplicando Solvay Torrelavega en el empleo propio y contratado se ha extendido a la prevención y atención médica de sus trabajadores.

Solvay ha comunicado la eliminación del vehículo de ambulancia propio y el recorte del 50% de la jornada del médico de empresa. Y ha anunciado que, tras casi cien años, a partir del 1 de enero de 2017, el servicio médico de empresa dejará de estar prestado por Solvay y será cubierto por Prevemont.

Para USO resulta "inaceptable" que Solvay mantenga "el caprichoso y costoso vehículo para la Dirección" y elimine la ambulancia que prestaba los primeros auxilios "con diligencia y prontitud ante un accidente de trabajo, infarto o lesión grave, donde la rapidez en la atención médica hospitalaria resulta clave para salvar la vida de cualquier trabajador del complejo químico donde se manipulan productos tóxicos y peligrosos".

Para USO resulta "inaceptable" que Solvay mantenga "el caprichoso y costoso vehículo para la Dirección"

En opinión dde USO, esta decisión de recortar el servicio de primeros auxilios y el servicio médico de empresa "marca el declive de Solvay-Torrelavega, como motor y ejemplo pionero que fue", implantando en su día servicios sanitarios, educativos, culturales y deportivos, donde el hospital de Solvay y su casa de reposo "marcaron todo un ejemplo de preocupación por la salud de sus trabajadores".

"Esta es la gota que colma el vaso del declive social de Solvay-Torrelavega", ha subrayado el sindicato.

USO defenderá ante los tribunales, "si fuera el caso en solitario, ante el silencio cómplice de UGT y CC.OO", la reposición de la ambulancia y el servicio médico prestado por personal propio de Solvay como tradicionalmente ha venido siendo durante los últimos 90 años.

El sindicato ha denunciado que esta decisión acompaña el plan de recortes de plantillas, que reduce a 300 trabajadores en el horizonte de 2018, de modo que Solvay continúa con "su política silenciosa de despidos objetivos, individuales y que contempla reducir otros 35 empleos a sumar a los 40 que se desprende con la segregación de la planta de cloro a la portuguesa CUF".

Una política de recortes en Solvay Torrelavega contrasta con la inversión de 223 millones de euros en la planta italiana de carbonato de Rosignano (115 millones de inversión de Solvay y 108 de las administraciones italianas), planta competidora con Torrelavega en el mercado europeo y de exportación de carbonato.

En este contexto, USO ha reclamado a las administraciones de Cantabria que emplacen a la Dirección de Solvay Torrelavega para liderar la negociación con el Grupo Solvay, "acompañando a su vez las inversiones como ha hecho el Ministerio de Desarrollo Económico italiano, la región de la Toscana y el Ayuntamiento de Rosignano".

El sindicato ha advertido que Solvay-Torrelavega debe resolver con urgencia la renovación de la cogeneración de gas y la técnica de carbón por una nueva unidad de producción de electricidad-vapor para ser más eficiente, competitiva y reducir drásticamente las emisiones de partículas, dióxido de azufre y óxidos de nitrógeno, para cumplir con el Plan Nacional Transitorio antes del 1 de julio de 2020.