UGT llevará ante Inspección de Trabajo el cierre de la cafetería de personal de Sierrallana
La sección sindical de UGT en el Hospital de Sierrallana ha anunciado que denunciará ante la Inspección de Trabajo el cierre de la cafetería de personal y la pérdida de sus dos puestos de trabajo "porque incumple el pliego de condiciones de adjudicación" de este servicio. Según precisa el sindicato en un comunicado, pese a la solicitud de la Junta de Personal y el registro de "más de dos centenares de firmas" en apoyo de la reapertura de la cafetería de personal, la Gerencia del hospital "permite a la empresa concesionaria mantener cerrado el establecimiento y sin su correspondiente plantilla subrogada en el propio pliego de condiciones", un trabajador que ahora está con un expediente de regulación temporal de empleo y una vacante de una baja voluntaria que no se ha cubierto "desde hace un año".
"Con el consentimiento de la Gerencia, la empresa cierra la cafetería por su propio interés y se desprende de la plantilla subrogada mientras contrata personal por horas en momentos puntuales", asegura UGT, remarcando que esta práctica "incumple la ley, el pliego de condiciones y su cláusula de subrogación de personal".
Para la sección sindical de UGT en el hospital torrelaveguense, la Gerencia "miente con descaro" al decir que el cierre de la cafetería de personal y la pérdida de dos puestos de trabajo no incumple el pliego de condiciones de adjudicación, que "establece claramente la subrogación de estos trabajadores para el mantenimiento y ejecución del servicio".
A su juicio, la empresa quiere "mantener cerrado el servicio de la cafetería, ahorrar costes, librarse de dos puestos de trabajo y salir del paso con la instalación de unos microondas, frigoríficos y máquinas de bebidas frías y calientes", y lo hace, como denuncia el sindicado, con la Gerencia siento "cómplice de todo ello". "Volvemos a épocas del pasado en las que la Gerencia permite a las contratas privadas incumplir el pliego de condiciones a costa de mermar la plantilla y un servicio público pagado con dinero público", lamenta la sección sindical de UGT en el centro hospitalario.