La protesta contra los eólicos llega a Torrelavega
Más de 250 personas, según la organización, han participado este sábado en una concentración en Torrelavega contra la instalación de parques eólicos en Cantabria y en la que se ha vuelto a pedir la anulación de todos los permisos eólicos y fotovoltaicos.
A la protesta han acudido vecinos de todos los valles de Cantabria, muchos del interior de la comunidad, para denunciar que "la industria eólica les echa de los pueblos", según ha explicado en un comunicado la Asamblea contra Viento y Marea, organizadora de la iniciativa.
Como ya ocurrió en la protesta celebrada en agosto en Santander, hoy también muchos de los manifestantes, algunos con trajes tradicionales, han portado maletas y enseres, escenificando el despoblamiento que traería consigo la implantación de esta industria energética en la práctica totalidad de los montes de media Cantabria. A ellas se han unido habitantes de Torrelavega y otras zonas urbanas de la región.
Tras su encuentro en la plaza del Ayuntamiento, han recorrido las principales calles de la ciudad.
La asamblea contra Viento y Marea ha denunciado que los "polígonos eólicos", como así los denomina, siguen apareciendo en el Boletín Oficial de Cantabria, siete en la última tanda.
Además, ha señalado que esta misma semana apareció también publicado en el BOC la amenaza de la eólica marina frente a las costas de Cantabria.
También ha apuntado que este mismo mes el Ministerio presenta a consultas otro polígono eólico más, Carabeos y un polígono solar fotovoltaico, Campoo FV, ambos en el centro-sur de Cantabria.
La asamblea ha señalado que la instalación de molinos supondría "una merma brutal de la actividad económica y social en los territorios afectados" ya que, a su juicio, significaría "la práctica desaparición" de cualquier negocio turístico y también la pérdida del valor patrimonial de casas, fincas y cabañas (entre un 10 y 50% según su distancia a los polígonos).
A ello, este colectivo añade las "graves afectaciones" sobre el paisaje, la perdida de bienestar y calidad de vida que conlleva toda actividad industrial o las "limitaciones" a los usos ganaderos tradicionales, de actividades de ocio en la naturaleza y cinegéticas,
Además, ha insistido en que el mercado energético español está ya "saturado": 112Gw instalados y 30Gw de consumo medio y cayendo
"Nos enfrentamos a una nueva burbuja financiera con la que repartirán muchos dividendos las grandes constructoras y las multinacionales energéticas. No resolverán ninguno de nuestros males. Hipotecarán, aún más, el porvenir de nuestras hijas y nietos. Así que, no lo permitiremos. No a los polígonos eólicos", han afirmado.