GASTRONOMÍA

El recorrido más dulce por Cantabria: una ruta para chuparse los dedos

Industria de fabricación de sobaos en Cantabria

La rica repostería cántabra es reconocida en todo el país. La excelente calidad de sus materias primas han hecho que postres como la quesada pasiega o los sobaos sean conocidos fuera de nuestras fronteras y reclamados en cada visita a la región. Otra muestra de la variada y exquisita cocina artesana 'made in Cantabria' es su prestigioso hojaldre, base de muchos dulces que nacen en la región. A continuación os presentamos el recorrido culinario más dulce de la comunidad.

HOJALDRE DE TORRELAVEGA

Hojaldres muchos, pero como el de la capital del Besaya ninguno. Es lo que dice todo aquel que prueba este postre con un sabor reconocible e irresistible. Almendrados, torrijas de hojaldre, palmeritas… son muchos los productos que se elaboran de forma artesanal en Torrelavega a base de su emblema gastronómico. Pero sin duda hay uno estrella, las polkas, tiras de hojaldre cubiertas por una capa de azúcar. Otros de los dulces más demandados que encontrarás en esta ciudad es la famosa tarta de hojaldre.

Polkas de hojaldre

CORBATAS DE UNQUERA

Deben su nombre a la peculiar forma que presenta este pastel de hojaldre que recuerda a una corbata o pajarita y a la localidad que les da origen, Unquera. Es allí donde se elabora este manjar a base de mantequilla, azúcar, huevos, harina y almendras. Quedarse con ganas de más a la hora de degustar este postre no es un problema, pues las puedes encontrar en tamaño XL para los más golosos. También son muy conocidas en esta zona las palmeras gigantes tanto normales como cubiertas de chocolate negro o blanco para compartir con familia y amigos.

Corbatas de Unquera | Foto: Corbatas Pindal

SACRISTANES DE LIÉRGANES

En esta zona de Trasmiera se elaboran los sacristanes, dulces en forma de lazo y muy crujientes. Están hechos con hojaldre 100% mantequilla y azúcar en grano. Si estás en Liérganes tampoco podrás resistirte a las pastas con forma de corazón elaboradas con mantequilla y canela.

ROCAS DEL RÍO MIERA

Sin movernos de Trasmiera también podrás degustar las deliciosas Rocas del río Miera, crujientes rocas hojaldradas con almendras.

Rocas del Río Miera | Foto: Pastelería Beragua

PANTORTILLAS DE REINOSA

Como ya habréis podido observar, el hojaldre es uno de los productos típicos de la región y son muchas las formas y sabores particulares que adaptan dependiendo de la zona de Cantabria donde se fabriquen. En Reinosa tienen su propio dulce a base de hojaldre, las pantortillas. Estas especialidades de la comarca de Campoo presentan una forma plana y redonda y están realizadas a partir de una masa de hojaldre con una capa de azúcar caramelizada.

Pantortillas de Reinosa | Foto: Wikipedia

LOS FRISUELOS Y CANÓNIGOS DE LIÉBANA

Delicioso dulce de las zonas de Liébana, Polaciones y Cabuérniga, los frisuelos se elaboran con leche, huevo y harina y, aunque su apariencia se asemeje a las tortitas americanas o las crepes francesas, son únicos por su sabor puramente cántabro. Su particularidad es que llevan miel artesanal de la zona, Miel de Liébana, un manjar con denominación de origen protegida que bien vale la pena probar.

También en Liébana son comunes los canónigos, compuestos por una base de natillas y merengue caramelizado.

CASCADAS DEL ASÓN

La Cascada del Asón es uno de los bellos rincones naturales con los que cuenta Cantabria pero, además de con la vista también se puede degustar con el paladar, pues existen unos dulces con el mismo nombre. Estas pastas de té con forma rectangular están rellenas con una exquisita crema de toffe.

Cascadas del Asón | Foto: Casa Wences

QUESADAS Y SOBAOS PASIEGOS

Dejamos la joya gastronómica cántabra para el final. No hay mejor broche de oro para este dulce recorrido por Cantabria que degustar las quesadas y sobaos pasiegos. Se trata de uno de los productos más reconocidos y comercializados de la gastronomía de Cantabria y típicos de los Valles Pasiegos. La quesada se realiza a partir de cuajo de la leche, mantequilla y azúcar mientras el sobao se prepara con azúcar, mantequilla, harina de trigo, huevos, sal, limón rallado, una cucharada de ron o anís y un poco de levadura en polvo. Y algún que otro secreto que se guardan los maestros reposteros de la zona, pues por algo su sabor es tan único y venerado. El sobao pasiego posee Indicación Geográfica Protegida desde 2004 e incluso tiene un día propio, el 'Día del Sobao' celebrado el 3 de mayo.

La quesada