Torrelavega Puede ha criticado la falta de medidas de control por parte del Ayuntamiento para evitar el impacto ambiental, e incluso económico, de las obras que se desarrollan al aire libre.

Actuaciones como la reciente demolición de uno de los edificios de la calle Carrera constituyen "un ejemplo de esta situación, que genera numerosas molestias a vecinos y comerciantes", ha señalado la formación en un comunicado.

Para Torrelavega Puede, aunque es evidente que la ejecución de obras al aire libre siempre van a generar un determinado impacto ambiental y un perjuicio para la calidad de vida de los vecinos, "es posible tomar una serie de medidas preventivas y correctoras con la que reducir su impacto".

"De esta forma se pueden aminorar de manera considerable la generación de polvo, ruidos y otras molestias asociadas a estas actuaciones", han indicado desde la formación.

Por ello, Torrelavega Puede ha anunciado que pedirá en el pleno municipal de este jueves, 29 de noviembre, la elaboración de un manual de buenas prácticas ambientales en obras urbanas para que se incluya en el Plan Municipal de Calidad del Aire. Con ello, la formación quiere que quede regulada la realización de este tipo de actuaciones y se sancione a quienes lo incumplan.

La formación ha señalado que otras administraciones locales cuentan con este tipo de reglamentación ambiental municipal, que incluye diversas medidas con las que reducir el impacto ambiental y la contaminación derivada de las obras urbanas y otras actividades contaminantes.

Entre ellas figura la limpieza en húmedo de las calles para evitar la recirculación de polvo o la instalación de filtros en la maquinaria más contaminante y paneles acústicos.

Para la formación, estas actuaciones pueden ser especialmente útiles y necesarias para el municipio dada inminente realización de la obra del soterramiento.