Cantabristas considera que “el cuestionamiento directo de las víctimas por parte del alcalde de Villaescusa, sumado al silencio cómplice del PRC, representan formas de violencia institucional intolerables”
El partido cantabrista considera inaudito que el PRC no haya cesado aún a Constantino Fernández, alcalde de Villaescusa, tras conocer su intolerable apoyo pasado al hombre detenido por grabar en los vestuarios a las jugadoras de un equipo de fútbol -algunas de ellas menores de edad-, cuando hace un año ya fue denunciado también por abusar de una niña y, estando todavía el caso en manos de los tribunales, no se le ha alejado de ejercer su profesión con menores
Cantabristas ha pedido al PRC que tome medidas de una vez y cese de inmediato al alcalde de Villaescusa, Constantino Fernández, por sus “repetidas acciones y actitudes machistas”. Tras el escándalo del hombre detenido por grabar a las jugadoras de fútbol en los vestuarios, los medios de comunicación destaparon que el arrestado ya había sido detenido el año pasado por una denuncia de abuso hacia una niña de cinco años, y que en aquella ocasión tuvo la complicidad y fue apoyado públicamente por Constantino Fernández.
Según esto, para Cantabristas, el alcalde de Villaescusa “tiene una responsabilidad directa en lo que ha ocurrido”, dado que, a pesar de estar el caso en los tribunales, decidió no alejar al detenido de ejercer su profesión con menores de edad. “Constantino Fernández cuestionó directamente a las víctimas en aquella ocasión, ejerciendo una violencia institucional que no puede desligarse del grave suceso de las grabaciones en los vestuarios”, han afirmado desde el partido cantabrista.
Desde Cantabristas, consideran que “el cuestionamiento directo de las víctimas por parte del alcalde, sumado al silencio cómplice del partido regionalista, representan formas de violencia institucional intolerables y que deben ser atajadas de inmediato”. Pasadas ya varias semanas desde que el caso se hiciera público, que el PRC no haya tomado ninguna medida contra el alcalde de Villaescusa es, a ojos de Cantabristas, “simplemente inaceptable, vergonzoso y ofensivo”.