Cantabria registró a 30 de abril de 2018 un déficit de 181,26 millones de euros, según la resolución de la Intervención General por la que se hacen públicos los estados de ejecución del Presupuesto de la Administración de la Comunidad Autónoma, las modificaciones a los mismos, así como los movimientos y situación de la Tesorería publicada este lunes, 21 de mayo, en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC). Los datos correspondientes al primer cuatrimestre del año, consultados por Europa Press, muestran que Cantabria ingresó 600,07 millones de euros y gastó 781,34, con lo que contabilizó un déficit de casi el 1,4% del Producto Interior Bruto (PIB). Estos datos de ejecución del presupuesto de Cantabria no incluyen las cuentas de las empresas públicas ni otras como las de la Universidad de Cantabria.

De los 600 millones de euros que ingresó Cantabria hasta abril, la mayor parte corresponde a la recaudación por el IVA (164,5 millones) seguida de transferencias del Estado (158,8 millones), del Impuesto sobre la Renta (156 millones) y los impuestos sobre consumos específicos (que gravan el alcohol, el tabaco y los hidrocarburos, entre otros), con 69,3 millones. Por su parte, las políticas sanitarias concentraron la mayor partida de gasto en el cuarto mes del año, con 366,6 millones, seguidas de las de educación, con 194,16 millones. Además, a infraestructuras se destinaron 64,17 millones, ligeramente por debajo del gasto de servicios sociales y promoción social, con 64,9 millones. Con todo, la tercera partida más cuantiosa, 115,8 millones de euros, fue para la deuda pública. Hasta abril, el Gobierno de Cantabria contrató préstamos por 209,12 millones y amortizó 105,5 millones de deuda, con lo que el endeudamiento de la comunidad autónoma se situó en 2.924,6 millones, un 2,8% más que en enero (2.844 millones).