El Museo Nacional y Centro de Investigación de Altamira acoge desde mañana, día 7, al 25 de febrero de 2018, una exposición sobre los Dólmenes de Antequera, nueva muestra sobre los sitios en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO.

Esta exposición se enmarca en la apuesta del Museo por revalorizar estos bienes "excepcionales", así como en la necesidad de concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de su conservación, ha informado la entidad del Ministerio de Cultura en un comunicado.

Comisariada por la arquitecta Aurora Villalobos, la exposición se mueve en la dualidad entre arte e historia, contemporaneidad y memoria al tratarse de la obra de un artista actual que explora los valores patrimoniales de estos bienes megalíticos.

A través de las 12 instantáneas del fotógrafo Javier Pérez González, colaborador del Conjunto Arqueológico Dólmenes de Antequera desde 2006, los visitantes del museo de Altamira podrán conocer un conjunto que en 2016, tras la declaración de la Asamblea General de la UNESCO como Patrimonio Mundial, entró a formar parte del mapa de los grandes monumentos megalíticos del mundo, convirtiéndose así en el primer bien de esta tipología reconocido en la Europa continental.

Un conjunto que conforma, junto al Sitio de Atapuerca y a la cueva de Altamira, la "gran tríada" de sitios prehistóricos de la Península Ibérica.

Con estas exposiciones, el museo refuerza una de sus líneas de trabajo, la de establecer un diálogo entre arte, arquitectura y paisaje.

Así se muestra en la obra gráfica del fotógrafo malagueño en la que logra esa interacción entre los tres monumentos culturales del Sitio de Antequera como son Menga, Viera y El Romeral y los dos naturales de La Peña y El Torcal.

Pérez González, especializado en nuevas técnicas de documentación del patrimonio, hace de la fotografía no sólo un medio para documentar sino un recurso para investigar los bienes culturales.

Entre otros, a través de su obra gráfica se pudo documentar la orientación del dolmen de Viera hacia el Este, registrando por primera vez la entrada del sol en la cámara en los equinoccios de primavera y otoño, ejemplificando de esta manera el canon de este tipo de monumentos en la Península Ibérica con su orientación hacia los ortos solares en los equinoccios; o se confirmó la orientación singular del dolmen de Menga hacia La Peña de los Enamorados, único dolmen en la Europa continental que se orienta hacia una montaña antropomorfa.

Así, el Museo de Altamira ofrecerá durante estos meses una muestra cuyo discurso expositivo se basa en este fenómeno de monumentalización paisajística, evidenciando en él sus valores culturales, los elementos naturales con los que dialoga y la relación intrínseca entre ellos.

La exposición se podrá visitar de martes a sábados de 9:30 a 18:00 horas, y los domingos y festivos de 9:30 a 15:00 horas.