La llegada del verano supone el inicio del periodo en el que mayor índice de insolaciones y golpes de calor se producen. Si siempre se aconseja que mayores y pequeños no salgan a la calle en horas de máximo calor y que permanezcan siempre hidratados, los perros deben seguir el mismo procedimiento.

Los perros regulan la temperatura corporal con menos eficacia que las personas, ellos no pierden el calor por la piel, sino por el aliento. Esto limita seriamente su capacidad para refrescarse y los pone en peligro cuando las temperaturas comienzan a aumentar de manera considerable.

Esto provoca que tengan poca predisposición a moverse, que busquen lugares frescos y ventilados y que recurran frecuentemente a su bebedero. En algunas ocasiones, puede ser complicado  percatarse de que el perro está padeciendo algún tipo de deshidratación pues, aunque el calor suele afectar a todos, ellos  no tienen herramientas de comunicación y pueden padecerlo de manera más grave.

Es aconsejable seguir una serie de recomendaciones para evitar posibles disgustos con los caninos, pues el dueño del animal debe ser el responsable absoluto de velar por su salud  y no debe exponerlo a situaciones para las que el perro no esté preparado debido a su condición.

Medidas de seguridad canina en verano

A continuación se expondrán nueve puntos que se deben tener en consideración si se tienen mascotas en el hogar, para que estas puedan disfrutar del verano al igual que el resto de los miembros de la familia.

1 Paseos al amanecer y al anochecer

Los perros deben salir a hacer sus necesidades entre dos y tres veces al día, y aprovechar ese paseo para hacer ejercicio. Pero en verano se debe reducir la estancia en la calle y procurar hacerlo durante las horas más frescas del día.

Es importante que si el paseo se realiza a una hora poco apropiada, este sea corto y siempre por lugares frescos y con sombra.

2 Los perros no llevan zapatos

Los perros tienen sus pies expuestos al asfalto caliente . Si se saca a pasear al perro cuando el sol está en lo más alto, sus patas podrían quemarse al tocar el suelo. Es muy importante  evitarlo, pues las quemaduras tardan mucho tiempo en sanar y el perro sufrirá durante un largo periodo.

Lo mejor es siempre sacarlo en horas frescas y buscando lugares con sombra, como zonas de árboles o parques que a la vez cuenten con césped.

3 Deben tener siempre acceso al agua

El verano es un problema para todas las razas , pero más cuando estas son Carlinos o Bulldogs, pues el fuerte calor les afecta debido a sus problemas respiratorios. Para mantener su temperatura estable deben beber agua de manera recurrente.

Cuando los perros salen de casa, dejan de tener agua a su disposición y es por eso que los dueños deben llevar un bebedero portátil para perros. Estos son muy prácticos y existen muchos formatos. Son cómodos si se piensa pasar varias horas con el animal fuera de casa, pues es la mejor manera para que ellos se mantengan hidratados durante todo ese tiempo.

4 Deben reducir el ejercicio

No es necesario forzarlos a jugar durante el tiempo que se está de paseo y es mejor reducir su actividad física. Hay que dejar que ellos decidan si desean jugar o no.

5 Les gusta el aire libre

No se debe dejar a la mascota en la terraza o patio durante horas cuando comienza a hacer calor. Aunque a ellos les guste el aire libre, no es aconsejable que pasen mucho tiempo fuera si el tiempo no acompaña.

6 No cortarles el pelo hasta otoño

Aunque sean muy peludos, hay que recordar que ellos no transpiran calor por el cuerpo. El pelo les protege aunque les agobie, por lo que es  mejor pelarlos a comienzos de la primavera para que en verano tengan una capa tupida que los proteja de insectos. La próxima vez que se desee pelarlos ya debe ser en otoño.

7 Seguir protocolo de prevención de parásitos y mosquitos

Si se va a salir al campo con frecuencia, o si se vive en una zona con mucha vegetación, hay que seguir el protocolo que dicte el veterinario para protegerlos de las picaduras de los insectos.

8 Refrescarlos si les gusta

A veces puede parecer que a los perros no les gusta que  los mojen, pero al repetirlo varias veces ellos comenzarán a valorar el frescor que esto les transmite. El agua debe estar fresca, aunque no fría. No deben ser forzados a ello, es aconsejable comenzar salpicándonos un poco o  mojando el suelo para que ellos se tumben si se tiene patio.

9 Realizarle revisiones

Si salen a pasar con frecuencia por zonas ajardinadas, lo mejor es que una vez lleguen a casa se revise que no se les haya quedado clavado o enganchado ninguna ramita, espina o insecto.