Equo exige que este año no se exhiba un cerdo muerto en la fachada de la Junta Vecinal de Otañes
Equo Cantabria ha exigido a la Junta Vecinal de Otañes que este año no se exhiba un cerdo muerto en su fachada, ubicada en la plaza de ese pueblo cántabro, ubicado en el municipio de Castro Urdiales. Equo ha recordado en un comunicado que para la Junta Vecinal de Otañes, –Administración organizadora del festejo–, el día de la matanza del cerdo es un día “en el que se fomenta la cultura y la tradición popular que recuerda la costumbre de muchas familias de Otañes”, y en el que tras un año de crianza natural, se procede a la matanza y posterior exhibición en la plaza del cerdo, que al día siguiente será cortado y cocinado, con la degustación en la plaza de picadillo y otros platos cocinados por vecinos e invitados.
Dolores Póliz: “Es un acto que atenta a la dignidad animal y a la dignidad de las personas que amamos a los animales”
Para Equo, “lo más llamativo” del festejo “consiste en la exhibición durante el día anterior del cerdo muerto colgado del balcón de la fachada del edificio de la Junta Vecinal, en la plaza del pueblo”, un acto que el partido ecologista ha tildado de “denigrante y poco educativo, además de contrario a las conductas cívicas y a las normas sanitarias” y ha asegurado que “seguir recurriendo a la muerte de un animal para deleite de los vecinos y vecinas del lugar resulta antediluviano”. Dolores Póliz, coportavoz de Equo Cantabria, ha añadido asimismo que “no sólo es un acto de mal gusto, sino que atenta a la dignidad animal y a la dignidad de las personas que amamos a los animales”.
La solicitud de Equo, dirigida tanto al alcalde de Castro Urdiales, Ángel Díaz-Munío –de la formación ecologista CastroVerde–, como a la Junta Vecinal de Otañes, “para que se evite la exposición del cerdo muerto colgado en la plaza” señala “el posible incumplimiento de las normas sanitarias”, por lo que se pide “que se efectúen los controles necesarios para garantizar la salud de las personas participantes”. Equo insiste en que “siendo una Administración pública quien organiza, promueve y ejecuta el despiece del animal, debería ser especialmente escrupulosa a la hora del cumplimiento de las medidas sanitarias en la matanza, conservación y despiece del cerdo”.