SANIDAD

La empresa valenciana Diavida será la propuesta para prestar el servicio programado de ambulancias del SCS

Aparcamiento de Urgencias del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla

La empresa valenciana Diavida será la propuesta por la mesa de contratación para la prestación del servicio programado de ambulancias del Servicio Cántabro de Salud (SCS) al haber presentado la mejor oferta económica, según ha confirmado el Gobierno regional.

El pasado 1 de diciembre, el Ejecutivo autorizó la celebración del contrato para el servicio de transporte sanitario no urgente en el SCS con un valor estimado de 30,3 millones de euros, IVA excluido, una duración de 24 meses y la posibilidad de dos prórrogas de hasta 12 meses cada una.

Sin embargo, el proceso de licitación quedó temporalmente suspendido en enero como consecuencia del recurso presentado por la Asociación de Empresas de Transporte Sanitario (AETRANS-Sanit), lo que no supuso la interrupción del servicio ni afectó al plazo de presentación de ofertas, que finalizaba el 9 de febrero.

A finales de mismo mes, el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales levantó la suspensión cautelar y el Gobierno anunció la próxima licitación del contrato.

Previamente, en un primer proceso de licitación, en junio de 2023, el contrato del servicio de transporte no urgente quedó desierto puesto que la empresa que se presentó, SSG, no cumplía las condiciones de pliego. Dicha sociedad era la competidora de Diavida en este segundo concurso.

SERVICIO PROGRAMADO

El servicio de transporte programado supone el traslado de pacientes cuya situación les impide desplazarse a través de los medios ordinarios de transporte y que no requieren asistencia técnico-sanitaria en ruta ni revisten características de urgencia.

Es realizado con ambulancias no asistenciales de forma individual o colectiva. Este tipo de transporte corresponde a las altas hospitalarias, altas desde urgencias, traslados a consultas, así como a visitas de terapias derivadas y pacientes que deban ser trasladados para recibir asistencia en hemodiálisis, rehabilitación, tratamientos oncológicos, consultas externas, realización de pruebas diagnósticas o terapéuticas complementarias, y cualquier otro procedimiento que se programe con antelación y precise el uso de este tipo de transporte.