La edad media de los cántabros se sitúa en 45 años
Son dos años más viejos que el conjunto de la población española, que tiene una edad media de 42,9 años.
La edad media de los cántabros se sitúa en 45 años en 2017, lo que supone que son dos años más viejos que el conjunto de la población española, que tiene una edad media de 42,9 años, según los datos provisionales de la Estadística del Movimiento Natural de la Población (Nacimientos, Defunciones y Matrimonios) correspondiente al primer semestre de 2017 del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Así, la edad media de los cántabros ha subido respecto a 2016, cuando era de 44,7 años, y es la quinta más elevada por comunidades autónomas, que lidera Asturias con 47,7 años de media de edad.
En este sentido, el 21% de la población de Cantabria en este 2017 es mayor de 64 años, la sexta mayor proporción por comunidades y frente a un 18% de media en España.
Además, el índice de envejecimiento en Cantabria asciende al 146,3%, lo que supone que por cada 100 menores de 16 años hay 146 mayores de 64, el cuarto mayor de todas las comunidades. En España es de 118,4%.
También es superior a la media la tasa de dependencia de Cantabria, del 55% sobre la población en edad de trabajar, la octava más elevada y frente al 53,8 del conjunto nacional.
En concreto, mientras la tasa de dependencia de la población menor de 16 años en Cantabria está por debajo de la media, con un 22,3% sobre el 24,6% de España, la tasa de dependencia de los mayores de 64 años es superior a la del conjunto del Estado, un 32,7% frente a un 29,2%.
Otro indicador de estructura de la población es la proporción de extranjeros por comunidad autónoma, que en Cantabria representan el 5,18% del total, el quinto menor porcentaje de una clasificación que lidera Baleares, con un 19,2%, y que cierra Extremadura con un 2,9%.
MATRIMONIOS
Por otra parte, en este primer semestre de 2017 descendieron los nuevos matrimonios que establecieron su residencia en Cantabria, un 4,9% menos que los registrados durante el primer semestre de 2016, frente al incremento del año anterior, aunque menos que en España donde el descenso fue del 6,2%.