La Policía Nacional y la Guardia Civil, en una operación conjunta denominada'Veterano-Jarana', han desmantelado una organización criminal dedicada a introducir en España grandes cantidades de cocaína por carretera y cuyo ámbito de actuación se centraba en Madrid, Cantabria y Toledo.

En total se ha detenido a diez personas, nueve hombres y una mujer, de diversas nacionalidades, con edades comprendidas entre los 41 y los 65 años, y se han aprendido 160 kilogramos de cocaína e intervenido 1.300.000 euros, 21 vehículos y otros efectos relacionados con el tráfico de drogas, han informado fuentes policiales.

Los detenidos, seis de ellos con antecedentes policiales relacionados con el tráfico de drogas y el blanqueo de capitales, fueron puestos a disposición judicial, decretándose el ingreso en prisión de nueve de ellos.

En la operación se han localizado diversos inmuebles expresamente utilizados para el depósito, tratamiento, almacenaje y distribución de la droga, y se han practicado diez registros domiciliarios, siete en varios municipios de la Comunidad de Madrid, dos en Illescas (Toledo) y uno en Torrelavega (Cantabria). También se ha inspeccionado una nave industrial en la localidad de Cartes (Cantabria).

En la operación se han localizado diversos inmuebles expresamente utilizados para el depósito, tratamiento, almacenaje y distribución de la droga, uno de ellos en Torrelavega

Durante la fase de investigación se llevaron a cabo las dos primeras aprehensiones significativas de droga, la primera de ellas el 14 febrero, en la localidad de Alcobendas, ocupándose un kilo de cocaína. En la segunda, realizada el 29 de marzo, en Madrid, se intervinieron otros doce kilos más de cocaína, así como cerca de 200.000 euros en efectivo, y se impidió una importante transacción de droga.

La investigación permitió descubrir que los ahora detenidos utilizaban países del norte de Europa como ruta para introducir la cocaína, en concreto Bélgica, Holanda y Francia, desde donde era cargada en camiones -tipo tráiler- y trasportada a Madrid, siendo recogida por miembros de la organización y almacenada en los diversos inmuebles con los que contaban para tal fin.

La vigilancia y seguimiento a los que se sometió a los investigados permitieron descubrir el pasado 20 de abril un encuentro para llevar a cabo una importante transacción de droga por parte de dos de los 'cabecillas' en un centro comercial de Alcobendas, que fue frustrado por los agentes y que culminó con cinco detenciones, seis registros domiciliarios y la inspección de la nave industrial.

En esta primera parte de la operación se aprehendieron en total un total 141 kilos de cocaína, que se sumaron a los intervenidos en la fase de investigación), y se intervinieron 941.315 euros en efectivo, además de otros efectos relacionados con la actividad.

Por último, el pasado 17 de mayo culminó la segunda fase de la operación con la práctica de otras cinco detenciones y tres registros domiciliarios. En esta ocasión se aprehendieron otros 7 kilos más de cocaína, distribuidos en dos de inmuebles, y se intervinieron otros 120.000 euros en efectivo, así como documentos falsos, réplicas de armas de fuego, y numerosos efectos relacionados con la actividad.

Paralelamente, se han incautado una veintena de vehículos, muchos de ellos de muy alta gama, e incluso un camión tipo 'tráiler', (cabeza tractora y semirremolque), además de balanzas de precisión, armas (replica de armas reales), máquinas para contar efectivo, terminales telefónicos, ordenadores, documentos falsos a nombre de alguno de los encartados y otros efectos.

Esta "importante operación" ha sido llevada a cabo, de forma conjunta, por el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga de la Unidad Orgánica de Policía Judicial, de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid, y el Grupo de Estupefacientes de la Unidad de Droga y Crimen Organizado (UDYCO) de la Jefatura Superior de Policía de Cantabria, con sede en Santander.