Cerca de mil personas protestan en Santander contra la puesta en libertad de 'La Manada'
Los participantes en esta concentración han denunciado que "violar sale barato" en España tras la decisión de la Audiencia de Navarra de poner en libertad a los cinco miembros de 'La Manada'.
Cerca de mil personas se han concentrado este viernes frente a la Delegación del Gobierno en Santander para protestar contra la puesta en libertad provisional de 'La Manada' en una protesta convocada por la Asamblea Feminista de Cantabria.
Los participantes en esta concentración han denunciado que "violar sale barato" en España tras la decisión de la Audiencia de Navarra de poner en libertad a los cinco miembros de 'La Manada', condenados a nueve años de prisión por un delito de abuso sexual con prevalimiento.
Así, han acudido a la Delegación del Gobierno con cazuelas, silbatos y muchos carteles que han colgado en la fachada del edificio y en los que se podían ver fotos de los miembros de 'La Manada' con consignas como "Ellos violan, la justicia permite", "No es abuso, es violación", "Esta justicia es una mierda" o "¡Violador, este es tu momento!, la justicia española está de rebajas".
Al ritmo del sonido de la cacerolada, los asistentes han coreado consignas como "Yo sí te creo", "No es abuso, es violación", "No es no" o "Hermana, aquí está tu manada", en apoyo a la joven madrileña de la que los cinco integrantes de 'La Manada' abusaron sexualmente durante las fiestas de San Fermín de 2016 en Pamplona.
La gran cantidad de participantes en la movilización ha obligado a cortar al tráfico la calle Calvo Sotelo. Entre los asistentes estaba la vicepresidenta del Gobierno de Cantabria, Eva Díaz Tezanos, acompañada de la directora general de Igualdad y Mujer, Alicia Renedo, y la de Universidades e Investigación, Marta Domingo.
Precisamente, Díaz Tezanos ha expresado esta misma mañana, a preguntas de la prensa, su "indignación absoluta" y su "incomprensión" ante la libertad provisional de 'La Manada' y consideró que ese tipo de autos "ayudan muy poco a que las mujeres denuncien ante las barbaries y hechos de estas características" y además generan una "desconfianza importante" en el sistema judicial.