1.100 toneladas de bonito de Cantabria se han vendido en una cadena de supermercados de toda España
Mercadona ha comercializado más de 1.300 toneladas de bonito de origen nacional en todas sus tiendas durante la campaña que arrancó a mediados de junio y terminó el pasado 30 de septiembre. De este total, más de 1.100 toneladas, el 85%, han sido de origen Cantabria, fruto de la colaboración de la compañía con el proveedor especialista Pescados José Luis, ubicado en Santoña y con acuerdos con nueve barcos.
La compañía de supermercados físicos y de venta online ha ofrecido el bonito fresco en varios formatos: pieza entera y en rodaja, tanto a granel en mostrador como envasado en el bandejero, respondiendo así a la demanda de los clientes de la compañía.
Especialmente los de Cantabria, donde este pescado es muy consumido; prueba de ello es que el mayor volumen de ventas de la compañía ha sido en las doce tiendas que tiene en Cantabria, seguidas de las ventas en Euskadi, Navarra, La Rioja y Asturias, ha informado Mercadona este martes.
PRODUCTOS DE PROXIMIDAD
El volumen de compras de bonito de esta reciente campaña responde a la apuesta de Mercadona por los productos de proximidad. Como todos los años, durante la campaña de bonito y cuando el producto cuenta con la calidad que demandan sus "jefes" (como denomina internamente a los clientes), hay bonito nacional capturado principalmente por barcos de Cantabria, lo que refleja la apuesta de la compañía por el sector.
En 2023 las compras de Mercadona en Cantabria alcanzaron los 459 millones de euros, un 14% más que al año anterior. Una "firme apuesta" por el sector primario cántabro y español que da como resultado que más del 85% del surtido de Mercadona sea de origen nacional, con productos cultivados, pescados, elaborados o transformados en España, ha destacado.
Asimismo, Mercadona defiende las prácticas comerciales justas y desde hace años está adherida al Código de Buenas Prácticas Mercantiles en la Contratación Alimentaria. Este acuerdo voluntario, que supone un paso en la promoción de prácticas comerciales justas, se enmarca en la Ley de Medidas para Mejorar el Funcionamiento de la Cadena Alimentaria y está impulsado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) en colaboración con distintas asociaciones de toda la cadena agroalimentaria nacional.