El Gobierno "no consentirá" que se pierdan las líneas de autobús de Alsa y buscará "alternativas"
Martín insta a la concesionaria a hacer "esfuerzos" y no devolver únicamente las rutas que no son "rentables" y no descarta quitar a la compañía una línea que sí sea rentable y hacer un paquete con las tres a las que renuncia para sacarlo de forma conjunta a concesión.
El Gobierno de Cantabria no va a "consentir" que las líneas de autobús a las que pretende renunciar la empresa concesionaria Alsa a partir del próximo 1 de enero se "pierdan" y buscará "alternativas" para que se mantengan, a ser posible en condiciones "muy similares" a las actuales. Así lo ha asegurado este jueves el consejero del ramo, Francisco Martín, al ser preguntado por el futuro de estas conexiones, que comunican Santander con Maoño y Escobedo, y Torrelavega con Santillana del Mar.
El titular de Innovación, Industria, Turismo y Comercio, departamento del que dependen los transportes autonómicos, ha indicado que el Ejecutivo está en "múltiples negociaciones" con la concesionaria y las administraciones locales implicadas, al tiempo que buscan otras compañías que podrían estar interesadas en ofertar el servicio. En este último sentido, ha asegurado que hay algunas que estarían "muy cerca" de quedarse con las rutas. El objetivo último es que las líneas afectadas –dos de las cuales ha reconocido que tienen "pocos" pasajeros, sin precisar cuáles son– se mantengan en condiciones "similares" a las que se venían ofertando hasta ahora.
De todas formas, Martín ha instado a Alsa a que haga "esfuerzos" y no devuelva únicamente las rutas que no son "rentables". Porque, a su juicio, no es "sensato" y resulta "sorprendente" que la empresa renuncie sólo a estos servicios, pues ello no constituye un acuerdo "simétrico" entre el Gobierno y la compañía. Ha insistido el consejero en que no es "riguroso" que por un lado la Administración tenga un "gesto" y haga el "esfuerzo" de prorrogar las concesiones y por otro lado se devuelvan las que "no son rentables". En este sentido, el responsable de transportes ha planteado la posibilidad de quitar a la compañía una línea que sí sea rentable y hacer un paquete con las tres a las que renuncia para sacarlo de forma conjunta a concesión.