Bulgaria ampliará su valla en la frontera con Turquía para frenar la inmigración
Sofía, 14 ene (EFE).- El Gobierno de Bulgaria decidió hoy ampliar a 82 kilómetros la alambrada de 30 kilómetros de longitud en su frontera con Turquía para frenar la inmigración ilegal, sobre todo sirios que huyen de la guerra civil en su país.
Sofía, 14 ene (EFE).- El Gobierno de Bulgaria decidió hoy ampliar a 82 kilómetros la alambrada de 30 kilómetros de longitud en su frontera con Turquía para frenar la inmigración ilegal, sobre todo sirios que huyen de la guerra civil en su país.
En un comunicado emitido tras una reunión del consejo de ministros se anunció la instalación de ingeniería de "obstaculización", como se denomina la valla, dentro de las "medidas urgentes" frente a la presión migratoria.
El nuevo tramo de alambrada se extenderá 82 kilómetros en la frontera con Turquía, con la que comparte 259 kilómetros, y costará unos 45 millones de euros, según informó posteriormente en el Parlamento el primer ministro búlgaro, Boiko Borisov.
"Es absolutamente necesaria esta extensión. La citada instalación disminuye en siete veces la presión migratoria", dijo Borisov, quien insistió en el carácter urgente de la obra.
De acuerdo con el comunicado del Ejecutivo búlgaro, el Ministerio del Interior tiene hasta el 30 de enero para ultimar los detalles de la obra y establecer un plan de plazos y los tramos prioritarios a construir.
Datos de Interior indican que en los últimos dos años más de 18.000 personas, principalmente de Siria, pero también de Irak, Afganistán, el Magreb y África subsahariana, han entrado de forma irregular en Bulgaria.
Fuentes de la Agencia Estatal de Refugiados informaron a Efe de que en los centros de acogida hay en la actualidad unas 6.400 personas, en su mayoría sirias.
Bulgaria construyó los 30 kilómetros de alambrada hasta ahora existentes a mediados del año pasado y desplegó un millar de policías para reforzar la vigilancia de su frontera con Turquía.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados ha criticado a Bulgaria por no ser más receptiva ante quienes huyen de conflictos armados y por las malas condiciones de acogida y el lento proceso para facilitar documentación a quienes logran alcanzar territorio búlgaro.